lunes, 22 de noviembre de 2010

Noticias de un país llamado Cielo.


106 veces se escribe la palabra evangelio en el NT.
Buenas noticias, anunciar, proclamar buenas nuevas.  

"El Espíritu del Señor está sobre mí,
      por cuanto me ha ungido
      para anunciar buenas nuevas a los pobres.
   Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos
      y dar vista a los ciegos,
   a poner en libertad a los oprimidos,
 a pregonar el año del favor del Señor"
(Lucas 4:18-19 )
Jesús  no fue enviado a predicar sino a mostrar al mundo la realidad de Dios y acercarnos a un Padre que desea tener un contacto personal con cada ser humano, en especial los más desposeídos e la sociedad.
John Wesley escribió en su Diario del día 17 de julio de 1739: "Fui a Bradford a cinco millas de Bath. Algunas personas se habían instalado en un lugar conveniente, en la cima de la colina a cuyo pie está la ciudad; en  ese lugar ofrecí a Cristo a  alrededor de mil personas, para sabiduría, justicia, santificación y redención". 
Predicar la palabra es esencialmente ofrecer al mundo a Cristo.
¿Cuál es la diferencia entre un predicador  y otro?
Sencillamente en que unos solo se muestran a sí mismos con todas sus cualidades y buena educación, grandilocuencia teológica y hermosa presentación (nada mal, por cierto, no tengo nada contra la teología y un buen discurso).
Otros muestran a Cristo, por el poder del Espíritu que está sobre ellos.

¡No hay nada mejor que darle a alguien una buena noticia, más aún, ser una buena noticia una misma!





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