jueves, 3 de abril de 2014

Terremoto en Chile.

Mientras miraba las noticias del terremoto en el Norte de Chile, recordé unas palabras de Job: “Lo que yo siempre había temido me ocurrió; se hizo realidad lo que me horrorizaba.” (3:25) 

Esta vez se hizo realidad aquello que esperaron generaciones. 
Más de 100 años con la expectativa de un gran terremoto que –dicen- aún no llega a pesar del 8.3 ocurrido recién. 

Tal vez se cumplan los pronósticos, como la ley de la atracción que algunos han popularizado. O simplemente suceda porque somos un país sísmico, como otros son desérticos, escarchados o montañosos, la naturaleza tiene sus propias leyes.

Para lo que sucedió, personalmente,  considero que se actuó a la altura de las circunstancias. 
No en vano nos hemos preparado desde niños. 

Hoy tembló por enésima vez y todavía (como los monos porfiados) estamos de pie. 





 

2 comentarios:

Fernando dijo...

Me acordé de ti y de Alemamá, Ojo Humano. Pero pronto dijeron en las noticias que fue (relativamente) suave, con pocos muertos y pocos daños, nada que ver con el desastre de hace 2 0 3 años.

Me alegro de que no te afectara y de que el país ya esté preparado para cosas así.

ojo humano dijo...

Este fue 8.3 un poco menos que el 27-F, estábamos mejor preparados, ese es nuestro plus.
Gracias por recordarnos.
La Ale está medio desaparecida, ruego a Dios no siga enferma.