viernes, 1 de febrero de 2019

A ordenar este verano.

Me he dedicado a hacer un “konmari”.
En casa se ríen porque lo he tomado muy en serio.
Igual han visto algunos capítulos de la serie “A ordenar” que transmite Netflix.

Preparo las diferentes cajas, bolsas de desecho y los lugares donde quedará cada artículo clasificado. Siento nostalgia de los años vividos.
Miro fotos desvaídas, cuadernos de apuntes escritos con lápiz Bic cuando no existía Word en casa, documentos vencidos de objetos que ya están hace años convertidos en chatarra.
Es admirable nuestra capacidad de guardar cachureos.
Si fueran piezas clásicas se consideraría llevarlas a un anticuario, pero todo tiene más valor sentimental que económico.
Ordeno y guardo.
Me resisto a botar algunas cosas.
En realidad todo método tiene su aplicación personal. Cada una puede tomar lo que el plan de ordenamiento aporta.
 Me fue bien, aunque todavía el escritorio lucha en la retaguardia.
 Ese es un desafío mayor.


-----------------------------------------------------------

Con su poder, el Señor hizo la tierra; 
con su saber, puso orden en el mundo; 
con su sabiduría, extendió los cielos.

Jeremías 10:12

-----------------------------------------------------------

3 comentarios:

Silvia Parque dijo...

¡Me encanta la serie! Una amiga me comparte su cuenta de Netflix y le agradezco que por su vía, llegue esta clase de "buena vibra" a mi vida.
Ya le llegará el momento al escritorio ;) ¡Felicidades por todo lo demás!
Y qué bonita palabra, "cachureos"; ahora voy a ese enlace :)

ojo humano dijo...

Gracias Silvia.
Espero que también te vaya bien en tu plan 2019
Saludos y abracitos a la pequeña.

Silvia Parque dijo...

De tu parte, Ojo humano. Siempre se los doy y le digo quién se los manda... No creo que me ponga atención, pero siento que le doy algo de "mi mundo".