sábado, 15 de junio de 2013

Luz de otoño.

Casi al borde del invierno, la luz de la tarde viste el jardín.
Todo tiempo pasado no fue mejor.
Ni peor.
El presente es el mejor tiempo, las oportunidades que no tomamos están en eso que rememoramos como un ejercicio de consuelo inútil.

Las oportunidades soñadas todavía no llegan.

¿Por qué desesperar?

Disfruto la tarde de otoño, la tibieza del sol mortecino, la luz blanda del día, observo el afán de las aves preparando nidos.
Otro verano vendrá, otra primavera, por el momento esto es lo que tengo, una limpieza al jardín, la poda de las rosas...la amistad, las voces furtivas de los transeúntes, la risa de los alumnos que regresan a casa, la lluvia que  escurre entre las plantas ¿no es precioso lo que Dios da?
Quisiera seguir el gran consejo del apóstol Pablo: "Y sean agradecidos", como un principio aplicable a todos los instantes. 
Alguien dijo que las grandes espectativas generan grandes frustraciones (o algo así), particularmente creo que si uno da gracias a Dios todo será una bendición, las espectativas !ah!, esos castillos en el aire, esas danzas de humo...solo Dios sabe lo que podemos administrar.

Por ahora, me dedico a podar el jardín. Mi Señor merece que lo realice a conciencia y lo mejor que pueda, aunque soy neófita en jardinería.
 


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“El sol no volverá a ser tu luz durante el día,
 ni te alumbrará más el resplandor de la luna, 
porque el Señor será para ti una luz perdurable; 
tu Dios será tu gloria.


 Isaías 60:19 (RVC) 


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(Escribo estas palabras recordándote y orando para que el Altísimo Dios y Padre te acompañe en esos difíciles caminos por los que te has propuesto andar.)


2 comentarios:

Fernando dijo...

No es que el presente sea el mejor tiempo, Ojo Humano, es que es el único que tenemos.

Conforme con lo de dar gracias a Dios. Da verguenza pero siempre nos dedicamos sólo a pedir, pedir, pedir, o como mucho a quejarnos. Una vez se me ocurrió que un día a la semana nos deberíamos dedicar sólo a rezar dando gracias.

Dios te ayudará para que el jardin quede bien. Y si no queda bien, da igual.

ojo humano dijo...

También hicimos en nuestra clase un día de dar gracias, se llamó "día sin quejas".
¿Cómo nos fue?
Más o menos, habría que repetirlo.
Gracias por tus reflexiones.
El jardín va avanzando poco a poco.