Día del amor (1).

Las historias de amor son como esos trenes que aparecen en la bruma de una estación, iluminan el momento y luego van desapareciendo en la distancia para llegar a otra parada y encandilar a otros viajeros que –pegados al lugar- esperan que llegue su propio tren.
Las historias de amor bien valen un momento de atención.
Nos demuestran que la fidelidad, la paciencia, el afecto y la confianza en el otro no son solo palabras del DRAE sino que pueden transformarse en vida real, aun en personas sin méritos intelectuales o económicos, parámetro actual del éxito supremo.
Esta era una mujer soltera y virgen.
Esta era una mujer que amaba a un hombre.
Esta era una mujer que dijo Sí a la famosa “prueba de amor”.
Esta era una mujer que resultó embarazada.
 Esta era una mujer que no abortó.
Esta era una mujer que no quiso darle padrastro a su hija.
Esta era una mujer que murió soltera.
Esta era una mujer que amó hasta el fin.
Esta era una mujer… mi madre, la mejor.

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"Nadie tiene mayor amor que este, 

que uno ponga su vida por sus amigos." 

 Juan 15;13

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